Día Mundial contra la Hepatitis

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El 28 de julio se celebra el Día Mundial contra la Hepatitis, una ocasión proclamada por la Organización Mundial de la Salud, que sirve para concienciar sobre la importancia de esta enfermedad que provoca diferentes enfermedades graves en el hígado, como el carcinoma hepatocelular.

El objetivo de la OMS es poner de relieve varias estrategias de salud a nivel global para reducir la probabilidad de infecciones de hepatitis en cualquiera de sus variantes (hay varios tipos: A, B, C, D o E). De esta manera, se conseguirá evitar un gran número de muertes que deja cada año esta enfermedad.

En la jornada del 28 de julio se llevan a cabo charlas, tratamientos e investigaciones por las diferentes instituciones de salud en todo el mundo que persiguen alcanzar las metas que hemos citado anteriormente.

Desde Promerits, queremos aportar nuestro granito de arena en el Día Mundial contra la Hepatitis poniendo el foco sobre algunas cuestiones relevantes relacionadas con la enfermedad. Un asunto que ha cobrado gran importancia en los últimos años es el papel de los psicólogos tras diagnosticarse la hepatitis en pacientes.

La ayuda psicológica tras el diagnóstico

Lamentablemente, hay un gran porcentaje de personas que desconocen ser portadoras del virus ya que, en muchos casos, no son hasta pasados al menos 10 años, cuando empiezan a desarrollarse los primeros síntomas. Esto provoca que los pacientes se crean sanos sin ser conscientes de su verdadero estado de salud. Es el caso, por ejemplo, de la hepatitis C.

Tal y como explica la psicóloga Ana María Montilla en el blog Infocop, la enfermedad provoca en muchas ocasiones que las personas que la padecen sufran cuadros de ansiedad o estrés ya que desarrollan ideas muy negativas con respecto a su esperanza de vida o la estigmatización del resto de la sociedad hacia ellas. Por eso, los pacientes se enfrentan a un impacto emocional grande cuando se les comunica la noticia de su diagnóstico.

Y precisamente, es en ese momento cuando cobra mayor importancia el rol de los profesionales de la Psicología. Estas son algunas formas de intervención psicológica que pueden ayudar a los pacientes con hepatitis:

Ofrecer a los pacientes la información adecuada sobre la enfermedad y el tratamiento después de recibir el diagnóstico.
Ayudar al paciente a la hora de tomar de decisiones sobre el tratamiento.
Prepararlos para los cambios que tendrán que hacer en sus rutinas diarias.
Gestionar el choque emocional que puede suponer un diagnóstico de cáncer.
Ayudar a mantener la calidad de vida del paciente y su estado anímico.

Está comprobado que proporcionar a los pacientes un espacio para desahogarse emocionalmente, les ayuda a contener el impacto emocional de la enfermedad y también a prevenir futuros trastornos del estado de ánimo o trastornos de ansiedad.

Por otra parte, es importante destacar que la familia también podría experimentar situaciones de angustia o miedo. La ayuda de los profesionales puede servir para formarles emocionalmente y que se conviertan en un apoyo incondicional para el paciente durante el tratamiento. Además, los psicólogos también les ayudarán a gestionar procesos de duelo en el peor de los casos.

No hay que olvidar nunca, que el optimismo es un aliado hasta en las situaciones más adversas. Por eso, si nos resulta complicado conseguir un talante positivo ante la adversidad, no debemos dudar en pedir ayuda psicológica para aprender a gestionar el proceso.

En Promerits, somos conscientes del papel crucial que juega la Psicología en la salud mental de las personas. Por eso, nuestra oferta formativa en esta área abarca desde el Grado Oficial en Psicología hasta Cursos Universitarios de Especialización en Trastornos de la Personalidad, Superación Emocional en Duelo o Psicoterapias breves, entre otros.